En los últimos años, pocas son las empresas y negocios que no han escuchado hablar sobre el Cloud o la Nube. Se trata de un servicio cada vez más utilizado por la facilidad de acceso a los datos de las empresas, así como por la seguridad que ofrecen.

Hoy nos sumergimos en el mundo del Cloud Computing para desentrañar muchas de las dudas que recibimos cada día por parte de clientes y usuarios online.

¿Qué es exactamente un servicio de Cloud?

Empresas especializadas en soluciones IT, como Powernet, cuentan en su cartera de servicios con el Cloud, un sistema que permite el almacenamiento de datos y el acceso a diferentes sistemas informáticos y aplicaciones a través de Internet.

Sin embargo, son muchas las definiciones posibles que podemos emplear para un servicio de Cloud. Una forma más sencilla de definir el Cloud sería englobarlo dentro de lo que conocemos como un servicio TIC (computación, comunicaciones, seguridad, etc.), el cual se contrata a través del pago por uso, o por suscripción, y que se presta a través de Internet.

¿Cuáles son las principales ventajas de un servicio de Cloud Computing?

Hoy en día, el 22% de las empresas en España utiliza servicios de Cloud Computing, una cifra que no ha dejado de crecer*. 

La razón principal es un menor coste ligado a una mayor rentabilidad. Muchas empresas ya no necesitan, gracias a este servicio, realizar una gran inversión en equipos, servidores y centros de datos, en su gestión y en su mantenimiento.

El servicio Cloud ha llegado para quedarse gracias a que el cliente solamente paga aquello que necesita, aumentando o reduciendo su infraestructura en la medida que su negocio lo requiere.

Estas ágiles condiciones de mantenimiento, movilidad y acceso desde cualquier lugar, actualización, seguridad, sostenibilidad, almacenamiento ilimitado y flexibilidad del servicio, son las que han llevado a las empresas a priorizar este tipo de servicios en los que el proveedor se encarga de todo lo que concierne al mantenimiento y la gestión de los equipos.

*Fuente: Quintgroup.

¿Cuáles son los servicios de Cloud que se ofrecen hoy en día en el mercado?

Existen tres tipos de servicios fundamentales:

• La infraestructura como servicio (IaaS).
• La plataforma como servicio (PaaS).
• El software como servicio (SaaS).

Sin embargo, esto es a nivel de control del cliente sobre el servicio, y realmente, en la actualidad, son múltiples los servicios Cloud ofertados: desde un software de contabilidad, hasta un sistema de gestión de bases de datos, pasando por infraestructuras sobre las que instalar cualquier aplicación que el cliente necesite.

Y es que las posibilidades del Cloud son muy diversas en función de su ámbito de uso: podemos encontrar servicios de almacenamiento, servicios de backup o recuperación ante desastres, sistemas de Inteligencia Artificial, etc. Es más: Netflix, Twitter e Instagram son también servicios Cloud y seguramente algunos de los lectores no se lo habían planteado.

¿Cómo se clasifican los servicios Cloud?

Volviendo a los servicios fundamentales, y atendiendo al control del cliente sobre el servicio, podemos clasificarlos en varios niveles:

1. IaaS: el proveedor proporciona una infraestructura de virtualización sobre la que el cliente crea, configura y mantiene sus máquinas virtuales, con las aplicaciones que requiera.
2. PaaS: los servidores y aplicaciones también los gestiona el proveedor. El ejemplo más claro en este caso serían las bases de datos, en las que el cliente tan solo tiene que cargar sus datos. El proveedor también se encarga del mantenimiento de la base de datos, así como de la infraestructura que la soporta.
3. SaaS: en el apartado de software como servicio encontramos sistemas de contabilidad, CRM’s y cualquier otro tipo de aplicación a la que nos conectemos a través de Internet.

Al respecto de los tipos de Nube, existen 4 tipos principales: nubes públicas, nubes privadas, nubes híbridas y entornos multicloud. Pero no todos los tipos de Cloud son para todas las empresas: las nubes nunca son iguales (incluso dentro del mismo tipo de nube).

Desde Powernet sabemos que la elección del tipo de nube o servicio Cloud es una decisión única. Por ello, comprender cuáles son sus similitudes y diferencias, así como las limitaciones de cada una, es fundamental para adaptar este servicio a las necesidades de cada cliente.

¿Qué necesidades cubren los servicios Cloud en las empresas?

Actualmente, el amplio abanico de soluciones existentes de Cloud Computing, abarca casi la totalidad de servicios que una empresa desee integrar en su nube: escritorios virtuales, copias de seguridad online, e-mails corporativos, hospedaje de webs y aplicaciones, etc.

Por ello, dependiendo de los requisitos y características de cada empresa, el proyecto se realiza a medida para satisfacer sus necesidades. De hecho, algunas empresas tan solo disponen de una red wifi con salida a Internet, y el resto de sus necesidades están cubiertas a través de servicios Cloud. 

Otras empresas, utilizan este servicio para cubrir necesidades puntuales o servicios que, siendo críticos, no forman parte de su core business, tales como el backup o la recuperación de desastres. En ocasiones, las empresas también emplean este recurso con el objetivo de absorber picos de carga, ya que es posible automatizar el crecimiento y la reducción de servidores en función de la demanda.

¿Por qué apostar por los servicios Cloud en tu organización?

El almacenamiento de datos y el trabajo en la nube son algunas de las ventajas que nos ofrecen los entornos Cloud, beneficiando tanto a la empresa como a sus empleados.

Disponer de servidores remotos aporta una gran flexibilidad en cualquier ámbito, optimizando el trabajo cooperativo e incrementando el rendimiento potencial de cada organización con garantías de seguridad.

Las empresas más dinámicas hacen uso de estos servicios debido a que brindan la posibilidad de crecer más rápido minimizando el riesgo y las inversiones, pues en cualquier momento se puede cancelar la suscripción. Por su parte, para las empresas pequeñas, permite proporcionar alta disponibilidad y redundancia a sus sistemas, sin necesidad de instalar una plataforma de virtualización a nivel local, la cual, normalmente, estaría sobredimensionada.

Sin embargo, por mucho que los servicios Cloud estén de moda, el Cloud no sirve para todo, ni para todos. En la mayor parte de los casos, la migración a una infraestructura Cloud supone un esfuerzo técnico considerable, y el coste de la misma puede llegar a ser bastante superior al de contar con un centro de procesamiento de datos propio, según el caso.

Por ello, desde Powernet siempre recomendamos acudir a profesionales IT de confianza que puedan desarrollar un proyecto personalizado, estudiando todos los pormenores, ofreciendo servicios a medida para cada necesidad.