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17/01/2023
La digitalización creciente de múltiples ámbitos de la sociedad está generando una serie de necesidades para adaptarnos a los cambios constantes que van surgiendo, relacionadas con la implementación de nuevas tecnologías en nuestro día a día.
Y la evolución de la conexión a Internet es el más claro ejemplo de este cambio: la necesidad del trabajo y la colaboración en línea y en tiempo real, la llegada del 3D y del VR, la evolución del IoT en el ámbito industrial, etc. cada vez requieren mejores condiciones de acceso, respuesta y velocidad de Internet.
El Wi-Fi 7 puede ser, el próximo año, la respuesta a esta demanda de un nuevo canal de conexión inalámbrico a alta velocidad que pueda suplir estas necesidades.
Pero, en primer lugar, ¿qué es el Wi-Fi 7?¿en qué se diferencia de sus predecesores, el Wi-Fi 6 y el Wi-Fi 6E?
El Wi-Fi es una tecnología que permite la conexión inalámbrica entre dos dispositivos. Sin embargo, existen diversos tipos de Wi-Fi, una serie de generaciones que han ido surgiendo a lo largo de los años para cubrir nuevas necesidades.
Estas generaciones se conocen como estándares y están basados en las características definidas por la Wi-Fi Alliance (WFA), una organización sin ánimo de lucro cuyo fin es el de fomentar la compatibilidad entre tecnologías Ethernet inalámbricas bajo la norma 802.11 del IEEE (Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos).
Por ejemplo, el Wi-Fi 6, dentro del conjunto IEEE 802.11, es un tipo de WLAN (IEEE 802.11ax) diseñada para operar en los espectros entre 2.4 GHz y 5 GHz. Lanzado públicamente en 2019, ya ese mismo año, la mayor parte de teléfonos inteligentes y dispositivos que se lanzaron ya fueron compatibles con esta tecnología.
Pero ahora, estamos asistiendo al nacimiento de una nueva WLAN, la IEEE 802.11be. Es decir, el Wi-Fi 7.
¿Qué diferencias encontramos entre el Wi-FI 7 y su predecesor?
El desarrollo del nuevo estándar lleva, por un lado, aparejado el desarrollo de otra tecnología, la MLO o Multi-Link Operation, con el que los dispositivos que empleen el estándar podrán conectarse a dos bandas de forma simultánea, transportando incluso información exacta en las dos para que la latencia quede reducida a la mínima expresión. Ello permite, a través de la agregación, conseguir velocidades jamás logradas.
Otra de las más importantes mejoras del nuevo estándar se encuentra en la modulación de amplitud en cuadratura, que pasa ahora a contar con 4096 QAM frente a los 1024QAM de su versión anterior, permitiendo un transporte de bits un 20% superior, logrando mayor optimización en la conexión.
Además, los canales pasan de disponer de un tamaño de 160 MHz a 320MHz, lo que permite empaquetar los datos a velocidades bastante superiores. Para que nos hagamos una idea, permitiría descargar un archivo que ronde los 20 Gb en unos 30-35 segundos.
En palabras del Dr. Carlos Cordeiro, CTO de tecnología inalámbrica y miembro de Intel, las velocidades de datos agregadas máximas serán hasta 7.2 veces superiores a las que se pueden lograr con Wi-Fi 6.
La fecha prevista para el estreno del nuevo protocolo es mayo de 2024, aunque en este año ya contaremos con diversos modelos que para someter a esta tecnología a distintos test.
El lanzamiento del nuevo protocolo supondrá diversas ventajas, por un lado, a nivel doméstico, como una mejor calidad en los streamings en directo, o una menor latencia en todo lo relacionado con la domótica y el gaming.
En las empresas y compañías, el IoT tendrá un papel importante en el rendimiento del Wi-Fi 7, especialmente en el sector industrial. Pero también en otros sectores gracias a su latencia ultrabaja constante y a su desempeño optimizado en entornos densos, en entornos Cloud, en aplicaciones interactivas, telediagnóstico, telecirugía, etc.
Desde Powernet estamos deseosos de analizar el rendimiento de este nuevo estándar que viene a revolucionar la velocidad inalámbrica de los desarrollos IT en 2024. Una tecnología que seguro nos sorprenderá por la utilidad en sus aplicaciones.
